A lo largo de la historia, el hombre ha creado edificios que consumen recursos. El rascacielos es el que encabeza la lista de este consumo voraz, la agrupación de alta densidad de actividades es decir, trabajar, jugar, etc, se han convertido en un presagio ominoso de nuestro futuro ecológico sombrío. Como reacción a los modernos rascacielos y sus dilemas, mentes eminentes del mundo han creado muchas variantes de los rascacielos en forma de la subscrapers e incluso groundscrapers. Sin embargo, aún así siguen luchando para lograr que sean autosuficientes. Hay greenscrappers que, aunque sí son ecológicamente sanos, y están vinculados al tejido urbano y la interconexión de las redes de producción que se sigue contribuyendo negativamente al medio ambiente.
El Water-Scraper propone liberarse de la trama urbana y de sus funciones como auto-suficientes embajadores en el mar. El Water-Scraper es una unidad autónoma flotante de espacio habitable, funcional, y el mantenimiento de sí mismo que funcionará, de manera colectiva, como una ciudad flotante. Es autosuficiente, ya que genera su propia energía a través de las olas, viento, corrientes, solar, bio, etc. y que generará sus propios alimentos mediante la agricultura, la acuicultura, el cultivo hidropónico, etc. Lleva consigo su propio bosque pequeño en la parte superior de su espalda y apoya los lugares para que los usuarios viven y trabaja en sus profundidades. Sus tentáculos bioluminiscentes proporcionar la fauna del mar un lugar para vivir y se congregan durante la percepción de la energía a través de sus movimientos cinéticos. Estas estrategias de sostenibilidad crean un oasis que no genera impactos negativos al medio ambiente, no sólo eso, sino que también mejora en ella por lo tanto, el "Plus" de esta iniciativa.
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